domingo, 16 de enero de 2011

Y pasó el 1º trimestre...


Desde pequeña siempre me ha gustado leer y eso me ha ayudado a conocer otras realidades diferentes a la que yo vivía.Pero, por influencia de mi padre, profesor de Ciencias, he heredado el gusto por la lógica. Así que soy una mezcla de idealismo y de razón, aunque, a veces, estas dos caras se difuminen, y últimamente con frecuencia.


Nunca pensé que este "destierro" me iba a influir tanto y tan pronto. Llegué sin pensar, pero sin ganas de implicarme demasiado, tenía todo el tiempo del mundo. Prefería acomodarme en el banco de la razón. Sin embargo, el primer día de mi vuelta al cole después de las Navidades, me encuentro con una preciosa frase que me dicen mis alumnos de 3º de Diversificación:"Maestra, te echábamos de menos. ¿Por qué no nos lee algo?". Ante esto, ¿qué hacer? Pues, señores, abandono mi banco de la razón para dejar paso a los sentidos e intentar enseñar las realidades que están escritas en los libros que he leido y en los que me quedan por leer.


Por fin he encontrado tierra donde sembrar las semillas de la ilusión, de la fantasía, y por qué no, de la creencia de crear un mundo mejor.